El maltrato entre compañeros
41933194151_94128c8009_n.jpg

LAURA CERDÁN


Catorce años en el momento de redactar esta página


El maltrato psicológico y físico se da en muchas ocasiones, situaciones y personas. El maltrato psicológico se suele dar en los casos de niños indefensos e incompatibles con los niños crueles que no tienen otra cosa que hacer que fastidiar a los niños con complejos, rectifico porque no son niños con complejos, les acomplejan con los insultos y la palabrería de esos niños crueles que no tienen otra cosa que hacer que meterse con los que consideran indefensos. Yo tengo mucha experiencia porque he sido una de las chicas más maltratadas por mis compañeros.

41892199882_dde8e40d83_o.jpg

Todo empezó cuando llegué a mi colegio con sólo cinco años de edad. Primero fue mi apellido, Cerdán.

Yo pensé que pronto se acabaría aquella pesadilla, pero estaba equivocada.

A los ocho años me pusieron un corrector para la espalda y eso fue lo peor del mundo. Además de verme con eso puesto, no tuve ningún apoyo por parte de mis compañeros y me derrumbé. No podía más. Era mucho para mi: cerda, fea, gorda, robocop, aparatosa… Todos contra mí. Y caí en una depresión.

Con doce y trece años las cosas seguían exactamente igual, seguía habiendo discriminación y poco compañerismo. Con trece años, en solo una semana me rompieron dos mochilas con patadas y tonterías. Sólo tenia el apoyo de mi amiga Beatriz a la que le sigo agradeciendo cada día que siempre haya estado ahí, a mi lado.

Al cumplir los catorce las cosas han cambiado. No se como fue, si es que han madurado o aprendido a apreciar lo que tienen delante sin guiarse por las apariencias o lo que diga la gente.

Ahora yo no los culpo y no les tengo en cuenta nada de lo que pasó en aquellos años. Son ellos quienes se avergüenzan del daño que hicieron.

Es difícil creerlo, pero ahora soy parte de ellos.

Es bonito recordar que en sólo un año se puede cambiar y recuperar una amistad que nunca tuviste. Ahora tengo una nueva vida, me cambié de instituto y estoy muy a gusto. Gracias a Dios no he tenido ningún tipo de problema y he congeniado muy bien con mi clase, aunque después me cambiaran. Estoy bien con compañeros y profesores. Son ahora mis amigos quienes me echan a mí de menos. Me llaman constantemente. Se acuerdan de mí para todo y quedamos de vez en cuando para dar una vuelta y contarnos nuestras cosas. Todos pensamos que ojalá no se cumpla ese dicho que dicen los mayores, LA DISTANCIA ES EL OLVIDO. Para mí siempre serán compañeros del grupo B.

Tampoco me han escuchado siempre algunos profesores. Tal vez no me prestaron toda la atención. Decían que eran niñerías. Quiero pensar que todo fue una horrible pesadilla y que nunca pasó nada. Empiezo una nueva vida con mis nuevos compañeros y profesores de los que estoy muy orgullosa y agradecida.

Para terminar quisiera decir que para evitar estos casos se debería tener en cuenta lo que sigue:

  • Dar a los acosados apoyo y comprensión.
  • Ser más severos con los niños crueles que se meten con los más débiles.
  • Avisar de los casos a alguien con más autoridad que tú mismo antes de que sea tarde.
  • Afrontar pronto el problema para ayudar y no hacer caer en situaciones desesperantes, como la depresión y el pensamiento de suicidio.

Sé que todo esto parecerá una locura a todo el que lo este leyendo, pero creedme, sé de lo que hablo.


40955509174_8bb6ce697f_n.jpg

Envía un comentario



Si no se indica lo contrario, el contenido de esta página se ofrece bajo Creative Commons Attribution-ShareAlike 3.0 License